jueves, 1 de enero de 2015

Las doce tribus de Hattie

Mi primera lectura este nuevo año es un libro escrito por una afroamericana que relata la historia de una mujer negra y abarca varias generaciones. Desde el año 1925 hasta 1980, Ayana Mathis nos cuenta las vicisitudes de los negros en Estados Unidos y los contrastes entre el norte y el sur, el primero representado por Filadelfia y el segundo por Georgia. Pero no es solo esta novela la historia de una raza en un país, es la historia de una familia cargada de seres, hijos arracimados de Hattie, la madre, que parecen salir de la nada y crecer donde ya no parecía posible que así fuera. Doce historias de doce seres nacidos de la misma madre, pero muy distintos, con el denominador común de ser seres criados sin amor, débiles, cargados de traumas y dolor. Es la historia de un dolor ancestral que parece remontarse al dolor del mundo. Las raíces de las plantas, la humedad, los bosques, llenan algunos de los momentos más memorables del texto y le dan una vida y una pureza que parece que sintamos el olor del verano, el silencio de las noches en el porche escuchando la nada.

El texto está cargado de poesía y de vida y cada personaje se encarga de quedar grabado en nuestra memoria después de acabar la novela, como sólo los grandes autores saben hacerlo. Es la primera obra de una autora heredera de Toni Morrison, Faulkner y la novela realista americana de los cincuenta. Deja una huella memorable y un regusto fatídico, como el de los textos bíblicos del Antiguo Testamento en los que el castigo es ejemplar. El primer capítulo es de los textos más bellos y crudos del libro. No hay que perdérselo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario